Descubre Constanta – Tour de un día entero en grupo reducido

Situada en al punto de encuentro de varias rutas comerciales, Constanza es una de las ciudades más importantes de la costa occidental del mar Negro.

La ciudad se ha convertido en algo más que el punto de entrada a la costa del mar Negro y así lo muestra a través de su gran historia y pasado, atestiguado por los numerosos vestigios romanos, edificios históricos, fachadas y mezquitas que pintan de colores el caso antiguo.

Deja atrás Bucarest y pon rumbo a la otrora ciudad de Tomis para un día de aprendizaje, descubrimientos y diversión.

Recorre la autopista hacia Constanza y cruza el puente sobre el Danubio para aprender un poco más sobre el primer puente que fue construido en 1895 por el ingeniero rumano Anghel Saligny durante el reinado de Carol I.

Pasa por la central nuclear construida por una empresa canadiense a principios de 1978 y, tras unas 3 horas de viaje, llegarás a Constanza, donde nos dirigiremos al centro histórico.

Constanza es la ciudad más antigua de Rumanía. Su primera aparición en documentos se remonta al año 657 a. C., cuando fue fundada por los antiguos griegos con el nombre de Tomis. La ciudad fue conquistada por los romanos en el año 71 a. C. y rebautizada Constantiana en honor a la hermana del emperador romano Constantino el Grande.

La ciudad se desarrolló durante el siglo XIII con los comerciantes italianos de Génova, pero empezó a decaer con la dominación otomana. Tras la guerra de la Independencia de Rumanía (1877-1878), la ciudad empezó a resurgir y se ha desarrollado hasta hoy en día como el mayor puerto del país.

Destacamos

• Museo de Historia y Arqueología: fundado en 1878, el museo alberga reliquias y piezas de arquitectura griega y romana.

• El edificio romano con mosaico fue descubierto en 1959 tras unas excavaciones arqueológicas. El edificio revela un mosaico romano original, parte del puerto comercial, que data del siglo IV.

• La estatua de Ovidio: representación de Publio Ovidio Nasón en la plaza Ovidiu, obra del escultor italiano Ettore Ferrari de 1887.

• La Gran Mezquita, construida entre 1910 – 1912 como homenaje a la comunidad musulmana local a petición del rey Carol I. Su torre de minarete ofrece una vista privilegiada sobre la ciudad y los alrededores.

• La catedral ortodoxa de San Pedro y Pablo, obra de Ion Mincuo y un bellísimo ejemplo del estilo arquitectónico bizantino.

• El acuario: inaugurado en 1958 como el primer acuario publico de Rumanía, el espacio ofrece una gran variedad de especies de peces, incluida una extensa colección de esturiones.

Repón fuerzas con un suculento almuerzo antes de emprender el viaje de vuelta a Bucarest.